Todo ángel es terrible Las Elegías de Duino. Rainer María Rilke No se dio cuenta cuándo comenzó a llover, pero podía sentir las gruesas gotas que bajaban del cielo, guiadas por el viento en un nefasto ángulo que parecía pensando para hacerle daño. Así comienza Sentir la sed, nueva novela de Gonzalo Himiob Santomé. La narración va dando cuenta de transformaciones radicales en la sociedad venezolana, al tiempo que un ángel hace su epifanía y, de esta manera, evoca lo incomprensible de misterios arcanos, de lo numinoso que con su poder fascina y aterroriza a la vez. Ese reencuentro funda el argumento central de Sentir la sed, una historia que relata la prodigiosa entrevista del escritor Rubén Alfredo Irtiago, con Azrael, el temible ángel de la muerte. Una panadería caraqueña es el escenario donde se encuentran el anciano y el ángel, que se presenta para “revelarle sus propósitos.” A partir de aquel momento, en medio de un lluvioso atardecer, se desencadena otra tormenta en l
Bitácora para promocionar(me) siguiendo intuiciones y fases lunares